DIABLO
Compañía: Blizzard Tipo:
¿Rol? Hola a todos. Este mes os vamos a comentar un programa, mal llamado juego de rol, más adelante veréis por qué. El juego se inicia con la consabida elección de tipo de personaje, los cuales se limitan a tres (¿?): Guerrero, mago y explorador, cada uno con sus cuatro (¿?) parámetros (fuerza, destreza, magia y vitalidad) previamente definidos de antemano. Tampoco se puede elegir el aspecto físico del personaje, con lo que se incumple una de las premisas para RPG... Un personaje diferente para cada partida. Una vez dentro del juego nos plantamos en el pueblo natal del personaje, pero pronto nos damos cuenta de que no hay otros pueblos ni lugares en el, por otra parte, limitado mapeado del juego. Dicho mapeado del juego se limita al pueblo y a los niveles inferiores de la catedral de la zona, en la cual hay que penetrar en sus intrincados (no demasiado) laberintos para masacrar todo lo que se mueva. Y no hay más... Y es que ésta es la pura verdad, no hay más. El juego se limita a hablar con los cuatro o cinco personajes (imprescindibles) del pueblo e intentar que te den pistas (más que evidentes) sobre cuál es el próximo objeto que les debes traer para que te den algún objeto mágico que aumente tus habilidades, ya que es en esto en lo que se basa todo el juego: en ir aumentando de nivel y mejorar tus habilidades para poder descender con garantías a la siguiente catacumba y poder masacrarlo a conciencia, para que a su vez te den más puntos de experiencia, etc, etc… El juego se convierte en la mera búsqueda de puntos y tu personaje un cúmulo de cifras ante la febril caza de víctimas. Por otra parte, DIABLO es brillante en su aspecto gráfico y sonoro, donde es una verdadera delicia perderse por el mapeado únicamente para deleitarse con los gráficos, o donde no es fácil mantener la calma ante varios bichos que gruñen a tu espaldda, u oír la sangre salpicar en el suelo... Pero no es suficiente. Aparte, el juego es sumamente fácil de completar, y con un par de semanas que le dediques una hora al día ya lo habrás completado casi sin despeinarte. Y si por esto no fuera poco, el final es el obligado enfrentamiento con el Diablo (que da nombre al juego), y por contra de lo podría esperarse, teniendo en cuenta el aspecto gráfico y sonoro mantenido durante todo el juego, éste no es nada espectacular. Se limita a ser un bicho más de los que pululan por allí, pero algo más grande y con más cuernos de lo habitual. Una vez cumplida la faena y eliminar al maldito, éste empieza a sangrar un poco, y hay un pantallazo y te encuentras otra vez en la pantalla de elección de personaje (que recordamos que únicamete había tres tipos)… Sin ninguna explicación, o secuencia animada que te explique que pasa, algo que siempre es de agradecer como recompensa por acabar el juego y dejar las cosas atadas y bien explicadas. Triste. Cabe resaltar la posibilidad que te brinda el juego de abandonar la partida en curso y empezar otra manteniendo el personaje que llevábamos hasta el momento, con sus puntos de experiencia e inventarios, para empezar otra vez, en teoría, nuevas misiones por cumplir. Pero a la hora de la verdad, donde deberían ser partidas diferentes cada vez que las juegues, me he encontrado que cada dos de cuatro misiones se repiten, llegando a acumular objetos (legendarios y únicos en el universo) por duplicado en mi poder… una gran idea que se pierde por esta falta de previsión. A pesar de contar con muy buenos antecedentes (WARCRAFT 1 y 2), BLIZZARD, ha intentado realizar un juego de rol vía módem o Inet, y técnicamente ha conseguido la maravilla del multijugador, pero realmente se ha estrellado en el desarrollo del juego, ya que éste brilla por su ausencia. BLIZZARD únicamente ha rascado la cáscara de la esencia de los RPG por ordenador, donde hay verdaderas sagas con miles de historias bastante elaboradas en ellas (juéguese a las sagas de ULTIMA o MIGHT&MAGIC). DIABLO no puede venderse como un juego de rol, sino que debería ser un arcade con toques roleros, y si es tratado de esta forma no se engaña al comprador, que se lleva la decepción de su vida al jugar un par de horas con su recién adquirido "juego de rol" para su PC. Ciertamente debe ser muy divertido jugar en red con él, porque el hecho de jugar solo se lleva la palma… Lo que debería extrañarme (y esto es a título personal) es que en revistas, supuestamente especializadas (léase PCMANÍA), se alabe este tipo de juegos, pero dado los últimos comentarios que he leído en estas revistas, que hacen más hincapié en los "dibujitos y ruiditos" que en el juego en sí (por ejemplo : "Los efectos de transparencia y niebla se encuentran en su salsa, la pixelación desaparece de los mapeados de texturas…"). Por favor señores, no nos tomen el pelo. Comentado por Ramón Fusté i Roig |
